JPMorgan Chase & Co. ha restringido el uso de su chatbot ChatGPT entre su personal, una medida que refleja los controles normales en torno a los software de terceros.
La persona que habló sobre el tema y prefirió mantenerse en el anonimato, según como lo aparece en un artículo publicado por bloomberg, donde comentan que actualmente el software de inteligencia artificial está restringido. Esta medida, que afecta a los empleados de toda la empresa, no fue desencadenada por ningún incidente en particular, sino que refleja los controles normales en torno a los software de terceros.
ChatGPT se ha convertido en un fenómeno de internet en los últimos meses. Esta tecnología en constante crecimiento genera texto, imágenes y otros contenidos en respuesta a una breve solicitud.
Esto ha creado un gran interés sobre su potencial futuro para todo, desde escribir poemas al estilo de Shakespeare hasta crear carteras de acciones. Incluso se está planeando un fondo cotizado en bolsa en torno a este concepto.
Microsoft Corp. está invirtiendo $10 mil millones en OpenAI, la compañía de investigación de inteligencia artificial detrás del chatbot. Esta acción podría suponer un desafío al dominio de Google en la búsqueda.
Sin embargo, también han surgido problemas desde el lanzamiento de ChatGPT en noviembre. OpenAI ha dicho que está trabajando para reducir los sesgos en el sistema y permitirá a los usuarios personalizar su comportamiento después de una serie de informes sobre interacciones inapropiadas y errores en sus resultados.
Para los prestamistas regulados de cerca, la precaución en torno a la introducción de cualquier nueva tecnología es comprensible. Entre 2021 y 2022, los reguladores estadounidenses impusieron sanciones por un total de más de $2 mil millones a una docena de bancos en relación con el uso no autorizado de servicios de mensajería privados por parte de su personal.
Un representante de OpenAI no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios. The Telegraph informó sobre las restricciones anteriormente.
Este último movimiento de JPMorgan es parte de un control riguroso sobre la tecnología de terceros y su uso por parte del personal. Es importante destacar que estas medidas son normales en instituciones financieras, donde la privacidad y la seguridad son de suma importancia.
