Apple ha lanzado al mercado su primer dispositivo de realidad virtual, el Vision Pro, un casco de alta gama que promete una experiencia de computación espacial sin precedentes. Sin embargo, el precio de este producto, que ronda los 3.500 dólares, lo hace inaccesible para la mayoría de los consumidores, lo que se refleja en las bajas cifras de preventa.
Según el analista Min-Chi Kuo, basándose en el inventario y el tiempo de envío, Apple habría vendido entre 160.000 y 180.000 unidades del Vision Pro durante el pasado fin de semana. Esta cantidad supera con creces las estimaciones previas de producción de entre 60.000 y 80.000 unidades para el lanzamiento inicial el 2 de febrero, lo que explica que el dispositivo se agotara nada más abrirse las reservas.
No obstante, Kuo señaló que los tiempos de envío no han variado en las primeras 48 horas, lo que podría indicar una caída rápida de la demanda después de que los usuarios más entusiastas y fanáticos hicieran sus pedidos. En cambio, los pedidos de iPhone suelen “ver un aumento constante en los tiempos de envío 24 a 48 horas después de que se abran las reservas”. Pero, por supuesto, el Vision Pro no está pensado para el consumidor medio en su estado actual, sobre todo teniendo en cuenta la falta de algunas aplicaciones populares como YouTube, Spotify o Netflix. Por no hablar del elevado precio base de 3.499 dólares, aunque Apple podría lanzar más adelante un modelo más barato, entre 1.500 y 2.500 dólares, según un informe anterior de Mark Gurman de Bloomberg.
Kuo añadió que, incluso con el dispositivo agotado según la cifra inicial de producción más alta de 80.000 unidades, eso solo representa el 0,007 por ciento de los 1.200 millones de usuarios activos de Apple, lo que hace del Vision Pro “un producto muy de nicho” a los ojos de Cupertino. Es decir, la gigante tecnológica tendrá que buscar alguna forma de generar y mantener el interés por el casco antes de su lanzamiento global, que se rumorea que tendrá lugar antes de la WWDC de este año, probablemente en junio. Mientras tanto, Apple también está ocupada instalando áreas de demostración en sus tiendas insignia de Estados Unidos, con la esperanza de hacer algunas ventas más con sus sesiones de 25 minutos.
